El GLP se utiliza en la industria y el transporte por sus ventajas económicas y ecológicas respecto a la gasolina y al gasóleo.
Uno de los grandes valedores del nuevo combustible es el colectivo de los taxistas.
La preocupación por desarrollar tecnologías que les permitan mantener y reafirmar su compromiso con el medio ambiente y con los carburantes alternativos, ha llevado a Dacia –firma del Grupo Renault conocida por ser una de las referentes en materia de innovación y ecología– a apostar con firmeza por el GLP: un combustible fabricado con butano y propano a presión que ocupa menor volumen que la gasolina convencional, facilitando así su transporte y su distribución. Un tipo de gas cuyo coste es equivalente al de un vehículo diésel, al que mejora en emisiones, que, además, se ha posicionado como uno de los favoritos de los profesionales de la industria y el transporte gracias a sus ventajas ecológicas y económicas (es hasta un 50% más barato que la gasolina y un 20% más barato que los diésel).
El director comercial del concesionario Dacia Vearsa de Zaragoza, Justo Layunta, asegura que han puesto "toda la carne en el asador apostando por este combustible alternativo; por eso, en todos los modelos Dacia disponemos de la versión GLP. Algo inédito en el mercado", reconoce. "Además, estos coches vienen directamente de fábrica, lo que permite ahorrarse el realizar la adaptación en un transformador externo". En cuanto a las ventas de GLP en Zaragoza, Layunta afirma que "el colectivo del Taxi ha sido el gran valedor, y nuestra gama Dacia ha contado con hasta un 70% de penetración en su colectivo en este combustible en el año 2016. Que un gremio tan exigente apueste por tu producto no hace más que reafirmar la calidad de los vehículos Dacia".
Las ventajas del combustible GLP
Más allá de las ventajas económicas y ecológicas, el GLP es un combustible que promete seguridad, pues, por ejemplo, "se ensambla en las
plantas del grupo Renault, suponiendo una garantía de calidad, de fiabilidad y de seguridad; y la homologación se realiza en el primer montaje, bajo normativa europea". Además, el depósito de estos vehículos se fabrica con un acero muy resistente, "siendo seis veces más grueso que uno clásico, y nunca con menos de cinco accesorios que contribuyan a la seguridad", concluye Layunta desde el concesionario zaragozano Dacia Vearsa.